ARANCEL ‘0’ para importar maquinaria
Crisis. La medida apoyará a la reactivación de la economía en el agro y la construcción.
ECONOMÍA
La importación y comercialización en el mercado interno de bienes de capital, plantas industriales y vehículos de alta capacidad destinados al agro y la industria estarán liberadas del IVA. Es un incentivo para la producción y la reactivación económica.
Se trata de la Ley 238 a la que tuvo acceso LA RAZÓN, la cual “establece incentivos tributarios a la importación y comercialización de bienes de capital y plantas industriales de los sectores agropecuario e industrial, para la reactivación económica y fomento a la política de sustitución de importaciones”.
El artículo 2 de esta norma que es analizada por la Asamblea Legislativa precisa que la importación de bienes de capital, plantas industriales y vehículos de carga de alta capacidad en volumen y tonelaje destinados a los sectores agropecuario e industrial, incluida las de vehículos frigoríficos y maquinaria pesada para el sector de la construcción y minería, están exentas del pago del Impuesto al Valor Agregado (IVA).
Asimismo, en el artículo 3 se define que la comercialización en el mercado interno de estos bienes de capital, plantas industriales y vehículos de carga están sujetas a la tasa cero del IVA.
INCENTIVO. Como justificación de la norma, el Gobierno destaca en el proyecto de ley que como consecuencia de la pandemia del COVID-19 y la cuarentena rígida adoptada en 2020 por la emergencia sanitaria, en Bolivia se registró una paralización de todo tipo de actividades económicas y afectó a la producción y comercialización de bienes y servicios, así como al consumo de éstos y a la generación de empleo en el país.
Ante esa difícil situación económica y los problemas de normalización de las actividades, que se tradujo en una disminución de capital de operaciones de las empresas, existe la necesidad imperiosa de que el Estado apoye con medidas de tipo fiscal al fortalecimiento de las unidades económicas productivas, en el marco de la política de reactivación económica y de sustitución de importaciones que el Gobierno viene desarrollando, se lee en la propuesta.
En ese marco, plantea establecer con carácter temporal (por un año) incentivos tributarios a la importación y comercialización de bienes de capital, platas industriales y vehículos de carga, con la finalidad de coadyuvar a la reactivación económica y fomentar la sustitución de las importaciones.
Agrega que este tratamiento impositivo diferenciado permitirá que las empresas establecidas en el territorio nacional no asuman la carga tributaria de este impuesto en la importación, ni se “traslade” al comprador al momento de la comercialización en el país, porque está destinado a incentivar la actividad productiva de estos sectores económicos.
También destaca que esta medida representará un ahorro e incentivo para el fortalecimiento de las empresas asentadas en el país.
La medida se enmarca en el artículo 308 de la Constitución Política del Estado, en sentido de “respetar y proteger la iniciativa privada, para que contribuya al desarrollo económico y social del país, así como al fortalecimiento de la independencia económica del Estado”.
IMPACTO. “El objetivo de la propuesta es beneficiar de manera temporal y de forma contundente con incentivos tributarios a varios sectores productivos de la conomía nacional, entre ellos el agropecuario, industrial, construcción y minería en el marco de nuestra política de reactivación económica y fomento a la sustitución de importaciones”, explicó el miércoles ante el pleno de la Cámara de Diputados el ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro.
Entre los sectores beneficiados está el agrícola, construcción, minería, textil, madera, industria, micro y pequeña empresa. “Por lo tanto, creemos que con esta medida vamos a incentivar la formación bruta de capital fijo en el país, que es un componente muy importante en el sector productivo”, dijo el funcionario.
Complementó que la medida también beneficia a las personas que quieran importar maquinaria productiva con los incentivos tributarios.
Para acceder al beneficio tributario, los bienes de capital importados o comercializados en el mercado interno por el sector privado no deberán exceder los 10 años de antigüedad. Las entidades públicas también podrán beneficiarse de esos incentivos tributarios siempre y cuando los bienes de capital, maquinaria y equipo sean nuevos.
La nómina de los bienes de capital exentos del pago del IVA será establecida por el Gobierno mediante decreto supremo.
En el artículo 5 de esta ley se señala que la antigüedad para la importación de los bienes de capital para los sectores industrial y agrícola será menor o igual a 10 años.
Los vehículos frigoríficos, de alta capacidad de carga en volumen y tonelaje para los sectores agropecuario e industrial, así como la maquinaria pesada para la construcción y minería, será establecida también mediante decreto supremo.
Las empresas e instituciones públicas podrán beneficiarse de esta norma, “siempre y cuando” los bienes de capital, las plantas industriales, los vehículos de alta capacidad en volumen y tonelaje, y maquinaria pesada, sean nuevos. La exención y la tasa establecidas en esta ley tendrán vigencia de un año a partir del quinto día hábil siguiente a la publicación del decreto reglamentario.
“Se está disminuyendo todo lo que corresponde a la parte tributaria para que se pueda importar maquinaria, es decir, bienes de capital que nos sirvan para la agricultura, para la manufactura; desde luego va a potenciar nuestra producción y también para la producción en el país de vehículos híbridos y eléctricos, esto en una lógica de sustitución de importaciones”, detalla el presidente de la comisión económica de la Cámara de Diputados, Omar Yujra, instancia que ya aprobó la norma.
Gremios destacan el incentivo
Industriales y exportadores coinciden en que la Ley 238 de incentivos tributarios, que analiza la Asamblea Legislativa es un impulso para la reactivación económica de estos sectores que fueron afectados por la crisis ocasionada por la pandemia del COVID-19.
“El Gobierno ha sacado una medida que nos parece muy buena y es el hecho de bajar los aranceles a cero, primero para los vehículos industriales y eléctricos, lo mismo para equipos industriales y bienes de capital. Ese sí es un impulso y por ahí deberíamos ir trabajando”, dijo a este medio el presidente de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), Ibo Blazicevic.
De igual manera el gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, considera que esta medida puede ayudar a fomentar la producción para generar más excedentes en el país y lograr mayores niveles de exportación.
“Es importante destacar esta iniciativa conducente a la recuperación de la economía, a la recuperación de cientos de miles de empleos perdidos el año pasado por causa de la pandemia y sobre todo conducente a no retroceder en cuanto a los avances sociales que se han registrado desde 2004 en adelante con una disminución sustancial de la pobreza extrema y relativa”, dijo.
Y complementó: “Necesitamos cuidar y mucho ese gran mercado interno que se ha logrado ensanchando la clase media, aumentando su poder adquisitivo porque todo eso ha significado una mejora en la calidad de vida.
En tanto el presidente de la Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia (Caneb), Danilo Velasco, se limitó a señalar que el arancel cero para la importación de bienes de capital beneficia a ese sector que busca producir más para vender a mercados internacionales. “Sí vemos una buena política de parte del Gobierno”, sostuvo.
No obstante, el presidente de la Cámara Boliviana de la Construcción (Caboco), Luis Bustillo, dijo a este medio que este tipo de iniciativas tributarias siempre son buenas y favorables, pero que es importante precisar que, a la fecha, el sector constructor tiene mucha maquinaria paralizada.
“Por lo tanto, sería efectiva para los empresarios con recursos económicos y con proyectos, además se debe conocer si se podrá adquirir equipos con una data de unos cinco años y no solo nuevos, pero surtirá el efecto deseado si esta medida también estará acompañada con la reactivación de proyectos de envergadura, de tal manera que permita al empresario adquirir o renovar, debido a que la maquinaria pesada es costosa y no es razonable tener equipos paralizados”, concluyó el ejecutivo principal de los constructores.